La Cúrcuma es conocida por sus numerosos beneficios para la salud gracias a su principal compuesto activo, la curcumina
Propiedades antiinflamatorias: La cúrcuma es bien conocida por sus fuertes propiedades antiinflamatorias, que pueden ayudar a reducir la inflamación en el cuerpo y aliviar condiciones inflamatorias crónicas como la artritis.
Antioxidante potente: La curcumina actúa como un antioxidante poderoso, protegiendo las células del daño causado por los radicales libres y ayudando a prevenir enfermedades degenerativas.
Mejora de la salud digestiva: La cúrcuma puede ayudar a mejorar la digestión, aliviar la indigestión, la hinchazón y el síndrome del intestino irritable (SII). También puede estimular la producción de bilis, mejorando la digestión de las grasas.
Apoyo al sistema inmunológico: Sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes pueden ayudar a fortalecer el sistema inmunológico, protegiendo al cuerpo contra infecciones y enfermedades.
Salud cardiovascular: La cúrcuma puede mejorar la salud del corazón al reducir la inflamación, mejorar la función endotelial (del revestimiento de los vasos sanguíneos) y reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares.
Propiedades anticancerígenas: Algunos estudios sugieren que la curcumina puede tener efectos anticancerígenos, ayudando a prevenir el crecimiento y la propagación de ciertos tipos de cáncer.
Mejora de la función cerebral: La cúrcuma puede ayudar a mejorar la memoria y la función cognitiva, y tiene potencial para proteger contra enfermedades neurodegenerativas como el Alzheimer.
Reducción de los síntomas de la depresión: Se ha demostrado que la curcumina puede ayudar a aliviar los síntomas de la depresión al aumentar los niveles de neurotransmisores como la serotonina y la dopamina.
Salud de la piel: Sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes pueden ayudar a mejorar la salud de la piel, aliviando condiciones como el acné, la psoriasis y el eczema, y promoviendo una piel radiante y saludable.
Desintoxicación del hígado: La cúrcuma puede apoyar la función hepática y ayudar en la desintoxicación del hígado, mejorando la capacidad del cuerpo para eliminar toxinas.
Importante: Diluir entre 30 a 35 gotas diarias diluídas en un vaso de agua. Se puede suministrar entre 1 a 2 veces al día, por 4 semanas. Es importante descansar una semana y retomar en caso de ser necesario.
Contradicciones: No todos los organismo son iguales, por lo que es aconsejable empezar con dosis pequeñas e ir aumentando. En caso de estar en un tratamiento médico con algún fármaco, en estado de lactancia o embarazo, consultar a un profesional de la salud. No suministrar en niños.
